Ana María Cueto

Mi nombre es Ana María Cueto Vera, soy representante de la Notaría de Don Miguel Esteban Barranco Solís,  ubicada en Teatinos, Málaga.

¿Quieres saber cómo he llegado hasta aquí? Esta es mi historia:

Desde siempre soñé con disfrutar de una vida profesional estable. ¡Y lo conseguí!. Pero el destino me jugó unas cuantas malas pasadas y le dio un giro de 180° a mi vida.

Del 2012 al 2014 afronté una serie de obstáculos a nivel personal que truncaron un poco mi carrera profesional e hicieron que modificara mi visión y percepción de la vida. Provocaron tal inestabilidad y convulsión interna en mí que me cambió el carácter, mi forma de ver la vida y mis objetivos en ella. Esta dura experiencia fue, sin embargo, un regalo que me impulsó a encontrarme a mí misma y a comenzar un bonito proceso de introspección y autoconocimiento que ya nunca ha parado. 

He hallado una vida tan plena y satisfactoria que hoy en día me dedico básicamente a ayudar a los que me rodean. Y lo más gratificante es que, en este camino, me he dado cuenta de que sólo hay que centrarse en hacer las cosas de corazón y lo demás te viene dado. Por eso me gusta pensar que todos podemos convertir nuestro dolor en nuestro tesoro más preciado.

Considero que la vida me puso a prueba y que los golpes que he recibido me han hecho cada día más resiliente. Increíblemente la adversidad me hizo salir fortalecida y con más energía que nunca.

En esta etapa de felicidad conocí por las carambolas del destino al que hoy es mi gran amigo Miguel E. Barranco Solís, Notario de Málaga, al que represento en este Club Empresarial.

Bueno, ya sabes un poco más de mí y lo que hago, pero ¿quién soy?. Todos nos hacemos esta pregunta en algún momento de nuestra existencia y no siempre es fácil contestar. Pero lo intentaré dándote unas cuantas pinceladas sobre mi vida:

– Soy una mujer muy emprendedora. La vida me ha enseñado que todo lo que tenemos lo puedes perder en un instante, por lo que he aprendido a ser independiente y a resolver mis problemas sin ayuda.

– Me considero una persona humilde, orgullosa de mis orígenes y, sobre todo, transparente. Mi tiempo libre lo dedico a ayudar a otros y esta faceta es, sin duda, de las que más satisfacción personal me da.

– Soy una “todo terreno”. He trabajado de recepcionista, de administrativa, comercial, pero también he opositado para albañil y pintora de brocha gorda, y he hecho tareas de “desokupación” de viviendas, entre otras cosas. Pero mi pasión es el sector inmobiliario y me encantan las reformas. ¡No concibo mi vida sin un palustre !

¿Qué adjetivos me definen? Incansable, hiperactiva, guerrera, entusiasta, perseverante, imparable y trabajadora.

Creo firmemente en el Karma y que “lo que das, recibes”. Por eso me gusta pensar que la vida me está regalando a mí la felicidad que yo deseo e intento conseguir para los demás.

– No creo que existan las personas malas, sino “maestros” que aparecen en nuestra vida para ayudarnos a aprender, evolucionar y hacernos más fuertes.

– Pienso que todos podemos llegar a donde nos propongamos, pero que la pasividad y la comodidad nos hace estancarnos y ver pasar nuestra vida como si fuésemos en un vagón. Yo me bajé de ese vagón en 2015 y me he metido en todos los vagones en que he podido y más.

– ¿Mi objetivo diario? Exprimir cada día de mi vida como si fuera el último, sacando lo mejor de cada persona y cada momento.